Dando
una ojeada a los textos publicados por simpatizantes y militantes kirchneristas,
que siguen centrando la atención en la marcha del 8N, me pregunto si tomaron
nota que la semana próxima, el 20 de noviembre, se convocó a una huelga general.
¿Será
necesario señalar que la convocatoria proviene de la CGT y de la CTA , centrales obreras
dirigidas por burocracias que fueron funcionales al kirchnerismo y que no
levantan un programa alternativo a la política oficial que asiste a los
banqueros y mantiene los privilegios de las empresas privatizadas?
Los límites
de la movilización que organiza la burocracia, ya los conocemos.
¿Entonces?
La
clase obrera tiene sobradas razones para una huelga general.
La
ley de ART votada por el kirchnerismo, hace retroceder la legislación laboral y
beneficia a las patronales.
La
inflación devora los salarios.
A
los jubilados se les niega el 82% móvil.
Los
trabajadores pagan impuestos al salario (ganancias 4º categoría)
Preparemos con
fuerza el paro, para que la clase obrera irrumpa con sus propios reclamos.
Por
7000 de salario básico.
Por
la anulación del impuesto al salario.
No
a la ley de ART.
82%
móvil a los jubilados.
Que
se reúnan asambleas en todos los lugares de trabajo y se discutan el paro y la
movilización.
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