domingo, 24 de marzo de 2019

En memoria de Ricardo Cairo


En el 73 cursamos 5to año en el Mariano Acosta.

Desde el 71 habiamos iniciado la lucha por el centro de estudiantes.
La Comisión Pro Centro, débil pero combativa había dejado sus huellas en la pared de la esquina de Urquiza y Alsina. El rojo en aerosol, dejaba una huella de pintura rápida. Por su caligrafía yo conocía a su admirable autor.
Era el comienzo de la Comisión.
El 72 estuvo marcado por el fin de Lanusse, el GAN y el crecimiento de las luchas obreras.
Y también de las organizaciones que reivindicaban la lucha armada.
Pero el 73 fue la eclosion del centro de estudiantes y así nació el CEMA.
La política se incluyó por derecho propio entre las materias de estudio.
Y ahí, en ese semillero de dirigentes, militantes, activistas y luchadores, estaba el tano Cairo.
Ricardo Cairo, ese que había sufrido un accidente en un choque del subte, sí, del subte B, y que le costó la fractura de su pierna, cirugías, clavos y una lenta recuperación con muletas.
Y además la pérdida de un año escolar.
El tano, como lo conocíamos era peronista.
Una mezcla de peronismo de base, admiración por el general y pincelas de JW COOKE.
Un amigo que me reprochaba mi izquierdismo y mi incomprensión del peronismo.
Y fuimos activistas y compañeros en ese año de toma del colegio y también de nuestro acto, ese 22 de agosto a un año del fusilamiento en Trelew.
"Trelew, la patria fusilada" fue mi primer pintada en la calle Urquiza, frente al Acosta.
Dejamos de vernos cuando terminamos el colegio.
Después el golpe de estado.
Y un día, la noticia brutal, aparecida vaya a saber cómo, en un diario.
El tano Cairo, Ricardo, había sido secuestrado del banco donde trabajaba.
Desaparecido.
Ya después del 83, traté de saber su destino y pocas referencias aparecieron en internet.
Hace pocos años Memorias de Balvanera reconstruyó la lista de desaparecidos del Acosta.
Les envié el dato.
El tano Cairo integra la lista.
No sé porque, sigo viendo al tano, con sus muletas, caminando junto a otro pibe por el colegio, mirando detrás de sus anteojos, explicándome que el problema es geopolítico, es norte sur, y que la patria va a ser liberada.
No te quiero olvidar.
No te puedo olvidar.
Por vos Ricardo, hasta la victoria siempre.
Luis Trombetta.

lunes, 18 de marzo de 2019

Paritarias en la AMM: defendamos el salario


Paritarias en la AMM: defendamos el salario.

La aceleración de la inflación, de acuerdo a los informes anunciados por el gobierno nacional, más el índice de la inflación en la CABA, superior al nacional, exige una recomposición salarial de acuerdo a la suba de precios de los principales insumos de la canasta familiar, es decir a una adecuación que correlacione con la devaluación mensual y con el costo de vida propio de la Ciudad.
El costo de vida de los principales productos de la canasta familiar, según datos del INDEC, supera en el interanual calculado a febrero el 50%.
Eso significa que los principales productos del consumo de un grupo familiar cuestan el doble que hace un año.
En el mismo orden, las cifras del costo de vida en la CABA, superan holgadamente a otras ciudades del país.
Las tarifas de servicios de energía, del transporte público, de telefonía, trepan dejando atrás la capacidad de compra de nuestros salarios.
El incremento de los salarios pactado en la paritaria del 2018, fue insuficiente. Los salarios de los médicos, como en otros casos, acumula un déficit no compensado.
En la Ciudad, en un año, los precios de la carne, la leche y el transporte aumentaron más del 58 por ciento. (Diario Z. 15/03/19)

La Dirección de Estadísticas y Censos de la Ciudad dio a conocer el número de inflación para febrero: en el segundo mes del año, el costo de vida para los porteños tuvo un aumento del 3,4 por ciento.
En los últimos doce meses, la carne aumentó un 58,7 por ciento y un kilo de asado ya cuesta más de 210 pesos. La leche subió 58,10 por ciento en un año y el transporte público tuvo un acumulado de 80 por ciento desde febrero del 2018.
…el pan y los cereales tuvieron, en los últimos doce meses, un aumento del 65 por ciento. El kilo de pan francés costaba, en febrero del 2018, menos de 40 pesos. Ahora, en las panaderías porteñas está a 81 pesos. La docena de facturas, a su vez, superó la barrera de los 100 pesos y su precio medio es de 127 pesos.
El transporte público tampoco estuvo ajeno a la lógica de los aumentos. En un año, entre colectivo, subte y tren aumentó el costo del boleto 80,8 por ciento. Según el informe, el tren tuvo una suba de 110,8 por ciento y los servicios por carreteras (colectivos) el aumento fue del 82,2 por ciento (Diario Z)

El 14/03/19 el INDEC anunciaba una inflación del 3,5%, que rompe el techo de 50% interanual.
Según la Dirección de Estadística y Censos del Gobierno de la Ciudad, en febrero, el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires (IPCBA) registró un incremento de 3,4 por ciento. Pero el rubro de la Canasta Básica con mayor aumento fue la  Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles que promedió un aumento de 6,6 por ciento. Las subas correspondieron, en mayor porcentaje, a los aumentos en la tarifa de luz, la suba en los valores de las expensas y el alza remanente en la tarifa de agua corriente (Diario Z. 14/03/19).

En este escenario, es imprescindible que la recomposición salarial tome en cuenta los valores reales del costo de vida porteño, que la actualización de nuestros salarios se realice en un solo pago, y que el porcentaje de incremento no puede ser inferior al 50%, aún sin considerar la pérdida de poder adquisitivo del 2018.
Pero como la devaluación del peso dependerá de varias variantes que incluyen los acuerdos con el FMI y los acreedores externos, para mantener el valor del salario, es necesario establecer además del incremento inmediato, una cláusula de actualización automática, conocida como gatillo.

En la antesala de un default que todos anuncian y que el gobierno no desmiente, la paritaria no puede condenarnos de antemano a la pérdida del poder adquisitivo de nuestros salarios.

Una vez más el silencio de nuestra Asociación de Médicos Municipales, anticipa un acuerdo secreto, bajo las condiciones impuestas por la patronal del gobierno porteño.

Es hora de tomar la iniciativa y exigir que la discusión paritaria tome estado público.
Luis Trombetta
Hospital Muñiz
Integrante del Frente de Recuperación Gremial en la AMM
Marzo de 2019