domingo, 25 de agosto de 2013

Owen, el sindrome de Hubris y un aporte a la confusión general

Ni Diego Peretti ni Nelson Castro. Un aporte a la confusión general.
Publico extractos de los artículos escritos por Owen que pueden ser consultados en PubMed. La traducción es imperfecta (que se le va a hacer).

Dice Owen en su publicación sobre el sindrome de Hubris:
Clin Med. 2008 Aug;8(4):428-32. Hubris syndrome. Owen D.

Resumen:
Síndrome de Hubris se asocia con el poder, más probabilidades de manifestarse cuanto mayor sea el ejercicio persona potencia y mayor el poder que ejercen. Un síndrome no se aplique a cualquier persona con enfermedad mental existente o daño cerebral. Por lo general, los síntomas disminuyen cuando la persona ya no ejerce el poder. Es menos probable que se desarrolle en personas que mantienen una modestia personal, permanecerá abierto a la crítica, tienen un grado de cinismo o el sentido del humor bien desarrollado. Cuatro jefes de gobierno en los últimos 100 años son señalados por haber desarrollado el síndrome de arrogancia: David Lloyd George, Margaret Thatcher, George W Bush y Tony Blair.

Y en otro artículo:

Hubris syndrome: An acquired personality disorder? A study of US Presidents and UK Prime Ministers over the last 100 years
David Owen and  Jonathan Davidson

BRAIN A JOURNAL OF NEUROLOGY - Oxford Journals. Medicine. Brain Volume 132, Issue 5 . Pp. 1396-1406.

Owen concluye:

La psiquiatría es una base más sólida en la materia si se mantiene enfocado en hechos observables a partir de fuentes fiables, en lugar de especular sobre los motivos de la conducta de los famosos, la mayoría de los cuales nunca han sido vistos por aquellos que expresan sus opiniones. Esto nos lleva a otra consideración desde el diagnóstico médico completo se basa tradicionalmente en un encuentro entre el médico y el paciente. Se basa en la información de la entrevista, así como información de garantía. Por tanto, cualquier intento de identificar el trastorno a una distancia debe ser tratado con precaución. Prematuro, acrítica, la difusión de las etiquetas debe ser evitado. Por lo tanto, hacemos hincapié en que, si bien el reconocimiento del síndrome de arrogancia es importante hoy en día, se necesita más evaluación cuidadosa en el futuro.

Por último, nunca hay que olvidar que en una carta, escrita el 5 de abril 1887 a Mandell Creighton, el autor de "Historia del Papado durante el período de la Reforma", Lord Acton escribió algo muy profundo, que precedió a su famosa frase: "Yo no puedo aceptar el canon que debemos juzgar al Papa y el Rey a diferencia de otros hombres, con la presunción favorable de que no hizo nada malo. Si no hay ninguna presunción que es la otra manera en contra de los dueños del poder". A esto le siguieron "El poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe absolutamente".

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