¿Avanza el plan de reconversión hospitalaria?
El lanzamiento en mayo de este año del Complejo Polivalente Hospitalario
del Sur (Ministerio de Salud de la CABA), ha encontrado una fuerte oposición de
parte de los trabajadores y la comunidad que se asiste en los Hospitales
Monovalentes incluidos en el proyecto.
Se trata del traslado de los Hospitales Marie Curie (Oncología), Udaondo
(Gastroenterología), Ferrer (Rehabilitación respiratoria), IREP (Rehabilitación
psicofísica), al espacio que ocupa el Hospital Muñiz (Enfermedades Infecciosas)
El proyecto carece de un programa sanitario y sólo se sustenta en los
futuros beneficios obtenidos de la venta de los terrenos públicos hoy ocupados
por los establecimientos de salud.
Los hospitales afectados se transformarán en Institutos a los que se
accederá a través de la derivación de otros efectores de la CABA.
También las camas disponibles disminuirán respecto a totalidad de las
dotaciones actuales de cada hospital. La reducción de la oferta de servicios de
salud en la Ciudad, conducirá a la reducción de personal.
Dos nuevos acontecimientos ocurridos en el Hospital Muñiz, se presentan
como un avance en el proceso de reconversión y compactación.
El primero, el cierre de las Salas de Asistencia Respiratoria y Terapia
Intermedia que originaron la queja gremial de sus respectivos Jefes Médicos
(17/07/18), y el segundo, la publicación en el Boletín Oficial (RESOLUCIÓN N.°
378/SSREGIC/18) de la “desafectación de la protección con nivel cautelar en
relación a diversos inmuebles ubicados en el predio del Hospital Muñiz",
que corresponden en la “catalogación a los siguientes pabellones: Sala 8 (Nº
24), Sala 9 (Nº25), Salas 10 y 11 (Nº26), Sala 16 (Nº31), Sala 17 (Nº30), Salas
18 y 19 (Nº29), Sala 29 y 32 (Nº28), Cocina Central (nº9) y Servicio Penitenciario
Federal Unidad 21 (Nº 32 y 27)", decisión que “se origina en el alto grado
de deterioro y obsolescencia que presentan la mayoría de los pabellones de la
Institución médica”.
Sin duda, la desinversión y el abandono de la actual y de las anteriores
administraciones de la Ciudad, son responsables del deterioro edilicio.
Lejos de la demolición y el enajenamiento de los terrenos públicos, el
sistema de la salud pública porteña exige una fuerte inversión edilicia,
tecnológica y de recursos humanos para poner al servicio de la población, un
proyecto sanitario que responda a las necesidades de hoy.
La actualización del recurso físico en salud es una necesidad imperiosa.
No se realizará con el avance de las topadoras sino con el aumento de la
inversión en el gasto público y un programa sanitario que lo respalde.
Luis Trombetta
Médico Infectólogo
Hospital Francisco J. Muñiz
1 comentario:
Suscribo todo lo que se refiere a mostrar la evidencia de la falta de atención a la salud pública, al abastecimiento de los hospitales, a la consideración y jerarquización del personal sanitario incluídos médicos, enfermeros y técnicos, a la falta de insumos, de aparatología ,de camas ¿es posible que en el Hospital Alvarez haya un solo sillón para diálisis que frecuentemente no funciona, habiendo varios pacientes que necesitan el servicio de diálisis porque en ello les va la vida?
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