Declaración del Comité Central del Partido Revolucionario de los Trabajadores
(EEK- Trotskistas)
El pueblo ha hecho escuchar su voz en las calles de manera muy clara. ¡No estamos de acuerdo con nada de lo propuesto! ¡No a las componendas y el apoyo a las propuestas! ¡Lacayos de la UE, el FMI y el Capital, tomen su memorándum y váyanse! ¡Todo el poder a los trabajadores!
El 12 de febrero, 199 miembros del Parlamento, un puñado de políticos pertenecientes al PASOK y a la derecha junto con dos miembros fascistas del Parlamento, votaron una vez más “si a todo” el cuerpo de los decretos homicidas y a los aumentos impuestos por los prestamistas internacionales, el FMI y la UE y por los grandes negocios locales, todos representados por el gobierno de Papadimos.
Al mismo tiempo, oponiéndose a estos 199 lacayos, un millón de personas desbordó la Plaza Syntagma y las calles adyacentes en el centro de Atenas así como en otras plazas y calles en toda Grecia, marchando contra el memorándum que expresa un canibalismo social. Con los trabajadores y la juventud en la vanguardia, el pueblo se reunió abarcando todos los sectores sociales populares, todas las edades, unidos por una lucha común.
El gobierno de Papadimos, temblando ante el potencial de una movilización de masas de estas características, lanzó un asalto a las masas planeado, utilizando la violencia policial y el arsenal químico desde el comienzo de la reunión de las masas en Syntagma a las 5.15. Ni los golpes propinados por la brutal policía antimotines y el escuadrón de motociclistas, ni las heridas a cientos ni los arrestos de docenas de personas detuvieron a las masas rebeldes, que se reagruparon y retornaron al campo de batalla una y otra vez. Un pueblo que ha sido convertido en una nación de desposeídos no tenía nada que temer. El terrorismo de Estado no puede ya aterrorizarlo.
La desesperación social se ha vuelto incontrolable. El fuego que arde dentro de la sociedad es mucho más intenso que todos los fuegos que incendian los bancos y las tiendas. Como siempre, la retaguardia social “correcta y prolija” y los líderes del KKE (PC griego) y SYRIZA, repiten por hábito duras palabras contra “los provocadores” y “barrabravas”. Esto no quiere decir que la policía (por orden de Papoutsis y Papademos) no envíe informantes para policiales a crear una atmósfera intimidatoria en un esfuerzo de asustar a las masas, por supuesto, esto es algo que las masas deben tener en cuenta para defenderse. Aquellos, que literalmente han convertido en cenizas las vidas de millones son los verdaderos provocadores, la UE, el FMI y los barrabravas en el Parlamento y el gobierno que se han burl! ado de la gente y han destruido los salarios, pensiones, trabajos, hospitales, escuelas, a la juventud y a los ancianos.
El 12 de febrero revivió el levantamiento y las revueltas de diciembre de 2008 y aterrorizó a los capitalistas locales y del exterior, levantando antes sus ojos el fantasma de la Revolución Social. El mismo sistema político burgués mal herido y en bancarrota ha sufrido esta vez un golpe aún más fuerte por la presión de una movilización de masas sin precedentes, que enfrentó a los tres líderes de los partidos- Papandreu, Samaras y Karatzaferis con renuncias y expulsiones incluso de algunos de sus partidarios más cercanos. Están más débiles ahora de lo que jamás lo han estado.
Pero no debemos quedarnos fijados en lo que sucedió, lo que hagamos el día después es ahora crucial. No permitamos que los burócratas y aquellos que tratan con aire condescendiente a los trabajadores continuar demorando o boicoteando las movilizaciones futuras. Las elecciones no traerán la solución, la solución yace en la organización inmediata y la conducción victoriosa de una Huelga General política indefinida que durará hasta la caída del gobierno de Papademos y sus sucesores potenciales, para remover los obstáculos que impiden a los trabajadores tomar el poder y el control de sus vidas con sus propias manos.
Los trabajadores y los desempleados no se sentarán esperando a ser masacrados por el nuevo memorándum. ¡Ya les han chupado la sangre por bastante tiempo! ¡ Los capitalistas deben pagar la bancarrota de su sistema! ¡No a las reducciones en los salarios, pensiones y trabajos, la restauración del poder de compra debe ser solamente a través de aumentos generosos. Inmediata cancelación unilateral de la deuda!! Nacionalización de los bancos y de todos los servicios públicos y control directo de los trabajadores de todas las industrias y negocios que cierren o despidan trabajadores, sin compensación a los capitalistas!
Juntos debemos expulsar a la troika, la UE y el FMI de nuestro país y pedir el apoyo de todos los pueblos que ya agonizan por culpa de estas mismas políticas: los trabajadores portugueses, 300000 de los cuales marcharon el 11 de febrero; los trabajadores españoles que han llamado a una Huelga General para el 17 de febrero y que están tomando las calles; los trabajadores italianos, los trabajadores de toda Europa. ¡Para evitar las consecuencias del Memorándum financiero que impone Bruselas y los decretos propuestos por Berlín y Schauble, debemos luchar por la desaparición y la disolución de la UE imperialista, debemos luchar por los Estados Unidos socialistas de Europa!
(EEK- Trotskistas)
El pueblo ha hecho escuchar su voz en las calles de manera muy clara. ¡No estamos de acuerdo con nada de lo propuesto! ¡No a las componendas y el apoyo a las propuestas! ¡Lacayos de la UE, el FMI y el Capital, tomen su memorándum y váyanse! ¡Todo el poder a los trabajadores!
El 12 de febrero, 199 miembros del Parlamento, un puñado de políticos pertenecientes al PASOK y a la derecha junto con dos miembros fascistas del Parlamento, votaron una vez más “si a todo” el cuerpo de los decretos homicidas y a los aumentos impuestos por los prestamistas internacionales, el FMI y la UE y por los grandes negocios locales, todos representados por el gobierno de Papadimos.
Al mismo tiempo, oponiéndose a estos 199 lacayos, un millón de personas desbordó la Plaza Syntagma y las calles adyacentes en el centro de Atenas así como en otras plazas y calles en toda Grecia, marchando contra el memorándum que expresa un canibalismo social. Con los trabajadores y la juventud en la vanguardia, el pueblo se reunió abarcando todos los sectores sociales populares, todas las edades, unidos por una lucha común.
El gobierno de Papadimos, temblando ante el potencial de una movilización de masas de estas características, lanzó un asalto a las masas planeado, utilizando la violencia policial y el arsenal químico desde el comienzo de la reunión de las masas en Syntagma a las 5.15. Ni los golpes propinados por la brutal policía antimotines y el escuadrón de motociclistas, ni las heridas a cientos ni los arrestos de docenas de personas detuvieron a las masas rebeldes, que se reagruparon y retornaron al campo de batalla una y otra vez. Un pueblo que ha sido convertido en una nación de desposeídos no tenía nada que temer. El terrorismo de Estado no puede ya aterrorizarlo.
La desesperación social se ha vuelto incontrolable. El fuego que arde dentro de la sociedad es mucho más intenso que todos los fuegos que incendian los bancos y las tiendas. Como siempre, la retaguardia social “correcta y prolija” y los líderes del KKE (PC griego) y SYRIZA, repiten por hábito duras palabras contra “los provocadores” y “barrabravas”. Esto no quiere decir que la policía (por orden de Papoutsis y Papademos) no envíe informantes para policiales a crear una atmósfera intimidatoria en un esfuerzo de asustar a las masas, por supuesto, esto es algo que las masas deben tener en cuenta para defenderse. Aquellos, que literalmente han convertido en cenizas las vidas de millones son los verdaderos provocadores, la UE, el FMI y los barrabravas en el Parlamento y el gobierno que se han burl! ado de la gente y han destruido los salarios, pensiones, trabajos, hospitales, escuelas, a la juventud y a los ancianos.
El 12 de febrero revivió el levantamiento y las revueltas de diciembre de 2008 y aterrorizó a los capitalistas locales y del exterior, levantando antes sus ojos el fantasma de la Revolución Social. El mismo sistema político burgués mal herido y en bancarrota ha sufrido esta vez un golpe aún más fuerte por la presión de una movilización de masas sin precedentes, que enfrentó a los tres líderes de los partidos- Papandreu, Samaras y Karatzaferis con renuncias y expulsiones incluso de algunos de sus partidarios más cercanos. Están más débiles ahora de lo que jamás lo han estado.
Pero no debemos quedarnos fijados en lo que sucedió, lo que hagamos el día después es ahora crucial. No permitamos que los burócratas y aquellos que tratan con aire condescendiente a los trabajadores continuar demorando o boicoteando las movilizaciones futuras. Las elecciones no traerán la solución, la solución yace en la organización inmediata y la conducción victoriosa de una Huelga General política indefinida que durará hasta la caída del gobierno de Papademos y sus sucesores potenciales, para remover los obstáculos que impiden a los trabajadores tomar el poder y el control de sus vidas con sus propias manos.
Los trabajadores y los desempleados no se sentarán esperando a ser masacrados por el nuevo memorándum. ¡Ya les han chupado la sangre por bastante tiempo! ¡ Los capitalistas deben pagar la bancarrota de su sistema! ¡No a las reducciones en los salarios, pensiones y trabajos, la restauración del poder de compra debe ser solamente a través de aumentos generosos. Inmediata cancelación unilateral de la deuda!! Nacionalización de los bancos y de todos los servicios públicos y control directo de los trabajadores de todas las industrias y negocios que cierren o despidan trabajadores, sin compensación a los capitalistas!
Juntos debemos expulsar a la troika, la UE y el FMI de nuestro país y pedir el apoyo de todos los pueblos que ya agonizan por culpa de estas mismas políticas: los trabajadores portugueses, 300000 de los cuales marcharon el 11 de febrero; los trabajadores españoles que han llamado a una Huelga General para el 17 de febrero y que están tomando las calles; los trabajadores italianos, los trabajadores de toda Europa. ¡Para evitar las consecuencias del Memorándum financiero que impone Bruselas y los decretos propuestos por Berlín y Schauble, debemos luchar por la desaparición y la disolución de la UE imperialista, debemos luchar por los Estados Unidos socialistas de Europa!